Por lo que hace referencia a disponer de un concepto o una terminología global de riesgosnaturales podemos partir de la idea presentada por el profesor Calvo Garcia-Tornel, que expone que “riesgo natural” es cuando ciertos sucesos extremos del medio exceden la capacidad de los procedimientos humanos para absorberlos o amortiguarlos. Se trata entonces de sucesos catastróficos, es decir, con un desenlace dramático que puede volver a desembocar en cataclismo: catástrofe de proporciones desmedidas.

Es decir, entendemos por desastres o catástrofes naturales aquellos fenómenos en que el agente del peligro es el medio natural y tienen un impacto fuertemente negativo en un tiempo relativamente breve sobre las sociedades humanas. El impacto puede ser de tipo demográfico, ecológico, económico y social, aunque prima la afectación directa a las personas en la percepción como catástrofe de un fenómeno. En esta definición se pueden incluir muchos tipos de catástrofes: seísmos, tsunamis, erupciones volcánicas, desprendimientos, aludes, subsidencias, huracanes, ciclones, inundaciones, incendios forestales, sequias, plagas de langostas, epidemias, etc.

Hay otros riesgos naturales en los que la velocidad  a la que se manifiestan es más reducida, por ejemplo, la erosión, minerales reactivos, radiación natural, sequías, cambio climático, etc. No quiere decir que los problemas que ocasionan no sean importantes, si no que los fenómenos no generan de forma directa daños excepcionales, como por ejemplo, la pérdida de vidas humanas.

Un riesgo natural es la exposición de una sociedad vulnerable a un tipo de amenaza importante de la naturaleza.